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ser pobre

viajé a huancavelica. luego de 17 horas en el bus a huancayo, y hacer un empalme de 2 horas y media por la nueva carretera a huancavelica, llego y empiezo mi trabajo de campo. serán por lo menos cinco días de visitar el centro poblado de palca, capital del distrito del mismo nombre.

durante todo el itinerario de trabajo escuché una y otra vez el mismo discurso en la gente que entrevistaba o me cruzaba, ya sea en huancavelica o en palca: "somos pobres, el estado debe ayudarnos". eso, de hecho es cierto: la desnutrición crónica, el envejecimiento prematuro (uno no podía creer cuando una señora que a simple vista parecía de 50 años te decía que tenía 31), falta de recursos, etc.

el discurso de "soy pobre", además, tiene efecto. es un recurso a lo "armas de los débiles" (a lo david scott): una forma que tienen los grupos subalternos para poder exigir, pedir y pitear por más recursos, acceder a algunos espacios, etc. desde el estado, los respectivos gobiernos responden a través de planes de asistencia, programas pro-pobre, tratan de objetivizar la pobreza, etc.; en ese camino, los "pobres" ganan espacio, poder, legitimidad. el estado finalmente no puede existir sin ellos. el clientelaje está asegurado.

el problema de este discurso completamente pragmático y operativo es que en el proceso se pasa por alto varias cosas: así, palca es un pueblo donde no hay el menor cuidado por el río que atravieza la pequeña ciudad; todo el malecón de huancavelica es un basurero; nadie hace caso a la autoridad.

conversando con un director de un colegio público en palca, contaba que los profesores, por ejemplo, no exigían mayor participación de los padres de familia argumentando que ellos "no tienen tiempo", "son pobres", "hay que darles las cosas gratis". la población no es nada tonta y actúa de manera recontra racional: si puede acceder a una educación de exigua calidad, con el menor esfuerzo, lo va a hacer. al final no hay compromiso de ni una parte y todo es un favor: los profesores le hacen el favor a los padres de familia de que los alumnos aprendan cuáles son las nuevas siete maravillas del mundo y los padres de familia le hacen el favor a los profesores descargándoles de responsabilidad.

lo del transporte público es otra historia. cada día tomar el bus de ticllas que va de huancavelica a huancayo era una aventura digna de la próxima película de indiana jones. o fácil era el joker quien conducía el bus. la última directiva de la municipalidad provincial era que el terrapuerto (impuesto por la familia benavides y con un contrato de alquiler desigual con la provincia) es el sitio oficial para que los pasajeros aborden el vehículo y que, en efecto, estaba prohibido recoger pasajeros en ruta. por supuesto que el chofer recogió gente en el camino y el serenazgo con la policía obligó que el bus vuelva al terrapuerto para salir de nuevo. la gente dentro, que tomó el bus en la carretera, se quejaba con el chofer: "ya no subas más personas". claro, la ley no existe cuando estás fuera y sí cuando estás dentro. "la culpa es de la policía", me dijeron en la agencia de ticllas. "no", le dije al vendedor de boletos, "la culpa es tuya". en mi cabeza le dije que era un reverendo conchudo. para otra oportunidad. dentro de todo, el mismo discurso: "somos pobres, si las cosas funcionaran todo sería más caro". argumento de un neoliberalismo a la peruana, donde coexiste el libre mercado, el clientelaje y el compadrazgo. los derechos y deberes ciudadanos, por otro lado, tienen un costo que debe asumirse y se recarga sobre el producto final.

cierro el escrito con algunas ideas libres. en primer lugar, huancavelica cojmo reflejo del perú. la historia que escribí puede adaptarse sin problemas al cotidiano de lima. en segundo lugar, dejar de pensar en rollos pro-pobres. subalterniza más al subalterno y alimenta estrategias de resistencia que terminan en el clientelaje político. en tercer lugar, abrir la cancha, dejar de hablar de asistencia social, de ayuda social. más bien hablar de políticas públicas, acceso a servicios públicos, etc.

claro, con un presidente que se cree santo, recontra complicado.

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7 comentarios:

  1. Unknown said,

    Seria bueno que publiques algunas fotos del rio, de la plazuela, del colegio , del omnibus, etc para ir teniendo pruebas del caos que has encontrado y tratar de hacer una compaña de cambiar la situacion. Que hace el Presidente regional? Cual es su plan de trabajo para el proximo año?

    on 12:13 p. m.


  2. Unknown said,

    Joder,

    En puno, donde vivo es lo mismo, y en elecciones es peor, la gente con que le regalen algo vitorea al candidato que se presente, y que mejor si les dan gaseosa y regalos. Los mismos que fueron donde unos van donde otros.

    Ja !!! yo creo que, ser pobre no es perder la dignidad.

    on 12:39 p. m.


  3. Jc Agüero said,

    Cosas similares he visto en Ayacucho y en zonas marginales de Lima y Cuzco, por ejemplo.

    Ser "pobres" como una estrategia de sobrevivencia, un tipo de capital narrativo para entrar en el mercado de los favores y la ayuda social (estatal y de la cooperación). Es un recurso análogo al uso del rótulo "soy víctima", que funciona en este escenario ambiguo de "la gran promesa de reparaciones", especialmente en el campo, peor no solo.

    La cosa es que, como señalas, estos rótulos sí sirven, y expresan estrategias probadas, y tan viejas como el refrán "el que no llora no mama". Pero lo que la gente ha aprendido es que hay que saber cómo llorar.

    Eso desde luego sin que se ponga en duda que pertenecen a sectores duramente exlcuidos y pobres desde el punto de vista económico, o que en efecto hayan sufrido una grave violación de sus derechos humanos.

    Sería bacán ver algunas fotos de Huancavelica y Palca, talvez colectivamente podamos ir armando un gran album comentado.

    Saludos

    on 4:21 p. m.


  4. Anónimo said,

    Ser pobre es muy doloroso, es injusto en un país donde hay tanto dinero, tantas comodidades en nuestras casas y tanta hambre, enfermedad, violencia, inseguridad y desprotección en las de las mayorías de la sierra rural, la selva indígena o colona, la costa urbano periférica.

    Y esta terrible, injusta y dolorsa pobreza es difícil cambiar, justamente por la perversa política para la cual es cómoda cubrir necesidades. Soy pobre, necesito esto, eres pobre te puedo dar esto. La respuesta a esta perversa política no es ningún secreto y claro que no es simple y tiene que ver con participación y politicas públicas, y muchas cosas más que se saben y repiten hasta el cansancio, pero sobre todo con cambiar eso de necesito dame y necesitas toma por es mi derecho y es tu deber. No necesitas un tubito que traiga agua a la plazuela o corriente bífásica al pueblo para conectar una licuadora (gracias fujimori) tienes derecho a saneamiento, salud, educación de calidad, justicia, respeto a tu diferencia, etc. No necesita Juan o Pedrito, que van a pedirle al alcalde, o al amigo presidente regional, es un derecho de todos que se exige y promueve pública, participativa y concertadamente. No necesitas porque eres pobre, tienes el derecho porque eres humano, eres digno, eres libre, autónomo, finalmente eres ciudadano de este país, malo o bueno, pero tu país, tu democracia.

    La pobreza es horrible, pero más fea que ella es su uso como excusa para dar aquí y no aquí, para no cumplir con derechos porque, está bien, es responabilidad de toda la llamada sociedad civil, pero sobre todo de las autoridades y sobre todo de las máximas autoridades del Estado, cuyos ternos se enfrían para proteger su corazón de un inusual encogimiento que pueda sorprenderlos ante la evidencia del dolor ajeno, o la inesperada aparición de la propia indiferencia en el espejo de la inhumana doctrina que los guía. Doctrina que nunca podrá cubrir por completo los espacios de humanidad que la seda o el polyester dejen al descubierto.

    Por eso, aún con lo mal que está todo, no se me agota la esperanza. Es como una obligación que tenemos, creer en la humanidad, por más pobre que ella insista en mostrarse.

    on 4:31 p. m.


  5. gonz780213 said,

    Y el empoderamiento? el emprendimiento? Y demás "temas" ongistas que han pasado (parcialmente o mutilados) a ser parte de la agenda pública y que a duras penas serán políticas públicas?

    Es muy cierto todo lo que escribes y tus tres ideas finales siento que deben sostenerse en un FUNDAMENTO. El problema es qué fundamento es ese, cómo es! No creo que todo se acabe con apuntar al estado, ni al mercado, menos a las personas. Por separado no, pero con un proyecto com país las cosas mejorarían. Pero los de arriba no quieren, los de abajo tampoco según tu post. Una pena, tendremos que reprogramar la agenda pública.

    on 6:27 p. m.


  6. Anónimo said,

    Casi de acuerdo nomás.
    La pobreza es un arma pero también una realidad. Una cosa es la pendejada que hacen las dirigentas de Lima del club de madres o el vaso de leche, o comedores populares que hacen negocio propio con la mitad de la ayuda que debe ser destinada a otros, que tienen años en la dirigencia y no la dejan, y que apelan proque el vaso de leche cubra hasta los "niños" de 18 años. Otra cosa muy diferente es la gente que sí necesita de esa "asistencia social", porque es una realidad tangible y urgente de atender.
    Lo que sí es claro, es que después de estos programas con décadas de funcionamiento ya debriamos tener un pan para que vayan disminuyendo progresivamente y ademas vayan acompañados de otros que hagan más promoción. Ningun gobierno se ha ocupado de eso y tus ejemplos son clarísimos. pero ni hablar cancelaría de saque los programas de asistencia, hay un proceso en medio.
    Y sobre la "racionalidad", pasa lo mismo. Es en principio una cuestión de supervivencia que muchas veces sobrepasa ese mismo fin y se convierte en caos, pendejada, la ley de quien le da la gana. Pero no pidas que haya un paradero único en un camino de la sierra que seguro no esta asfaltado y que va de pueblo en pueblo pues.

    on 1:28 a. m.


  7. Roberto said,

    yo no hablo de cancelarlos, ojo. como digo, sí, la pobreza es algo tangible, objetivo, pero también es algo recontra subjetivo, cargado de sentidos, y la gente pobre, lejos de ser pasiva, son agentes sociales.

    y el camino estaba asfaltado. y sí, ¿por qué no pedir paraderos marcados?

    on 7:32 a. m.