El viejo blog del Morsa

la última parte del informe sobre la caída del fokker que llevaba a todo un equipo de aliancistas el año 1987, reveló, entre otras cosas:

1. la negligencia por parte de la marina de guerra al encargar a un piloto inexperto el mando de un avión defectuoso. deliberadamente la marina de guerra sabía los peligros de tal decisión, pero sin embargo, dejó hacer.



2. el maltrato a los familiares de las víctimas del accidente (por negligencia). en un correo que leyó cecilia valenzuela (y que rosa maría palacios también mostró), se narraba cómo los marinos apuntaban con sus rifles a la gente cuando esta pedía justificadas explicaciones e información sobre sus familiares.

3. el desprecio por la "familia blanquiazul" por parte del entonces presidente de alianza agustín merino. no solo al decir que un posible juicio era cosa de cada familiar o deudo, sino que no se iban a meter con la marina, "nunca con la marina", sentenció al final del informe.

aún cuando martín tanaka quiera hablar de que en el país la fragmentación y la democratización son las principales características del país, es claro que estas sobreviven y se entrecruzan con lo que el llama las "grandes imágenes": la herencia colonial, el patrimonialismo, etc.

"nunca con la marina" suena a lo que alan garcía (como muchos otros en este país) se refiere cuando dice que a las fuerzas del orden no hay que perseguirlas. esta imagen de las fuerzas armadas como institución tutelar (junto con la iglesia) es lo que julio cotler ha ido llamando esta fuerza doble de la espada y la cruz, que aún nos gobiernan. a la imagen se le añade el fuerte racismo que aún recorre el país (y que se acrecienta, justamente por esa democratización social a la que hace mención tanaka, como una suerte de reacción), y tenemos (toscamente en este texto) esa herencia colonial como interpretación del país. el dirigente que vive de los jugadores (de sectores populares, la mayoría), que los trata como su familia, pero que a la hora de la verdad, a la hora de sacar la cara frente al poder fáctico de la marina de grau, no, nunca, que ellos se las arreglen.



como si habláramos por un momento de los miles de familiares que perdieron a alguien durante la violencia política de los años 80s y 90s. "exageran", "son llorones", han dicho algunos altos mandos militares. y nos da miedo como sociedad y nos rendimos frente al poder del fusil.

quizá deberíamos recordar lo que la comisión de la verdad dijo en su informe sobre esa delgada línea de sometimiento entre el poder civil y el poder militar:

Conclusión Nº 94. La CVR considera el encubrimiento de la matanza de Cayara, ocurrida en mayo de 1988, como paradigmático de la nueva actitud del partido de gobierno frente a la actuación de las fuerzas armadas en la lucha contrasubversiva. La comisión investigadora conformada en el Senado de la República, presidida por el parlamentario del PAP Carlos Enrique Melgar, dictaminó que la matanza no había ocurrido, mientras que la minoría de dicha comisión y un fiscal aseguraban lo contrario. El dictamen, no obstante, fue aprobado por la mayoría aprista. Las investigaciones de la CVR confirman la matanza de Cayara y encuentran responsabilidad política en el PAP por colaborar en el encubrimiento de dicha masacre.

ahora tenemos un segundo gobierno aprista. y con un alto oficial de la marina retirado de vice presidente y con graves acusaciones de violaciones a los derechos humanos.

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